Intento seguir solo las noticias que me afectan. Por eso, conforme avanzaba el mes, cada vez que escuchaba o leía algo de lo que se podría o no hacer en Navidad, me venía este pensamiento: «Que sea lo que Dios quiera». Al final, pudimos juntarnos todos los hermanos, y Reyes y las sobrinas, para celebrar el 1 de enero el 80 cumpleaños de mi madre en Jerez de la Frontera.






Fue la primera Navidad sin mi padre. Lo pasamos bien entre las miles de noticias que todos traíamos, las misas rocieras en el salón de la casa y los casi 60 microvídeos que entre todos hicimos para celebrarlo. Fue muy emocionante y mi madre se lo pasó genial. Desde León contribuimos algunos amigos y conocidos de mi madre.
Mi última gran pasión
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